lunes, 1 de abril de 2013

Hijos de Escocia... ¡Yo soy William Wallace!

Hoy he vuelto a ver la película de Braveheart, protagonizada y dirigida por Mel Gibson y ganadora de 5 premios Oscar en 1995. 
Una de mis películas favoritas y de las mas épicas que se pueden ver en el cine. Libertad, justicia y épica, tres palabras que bien pueden resumir las más de tres horas que dura la película. 


Como resumen os dejo el gran discurso de William Wallace antes de la batalla para animar a los suyos. Pelos de punta, disfrutad:


(Los soldados escoceses se encuentran preparados en el campo de batalla, asustados por la multitud del ejercito británico)
-Soldado 1: Son muchos. Yo no lucharé para que esos tengan mas tierras y ser su esclavo.
-Soldado 2: Yo tampoco. (levantando la voz) Escuchad, no pienso morir por esos bastardos. ¡Vámonos!
(Empieza la deserción)
Lochlan: ¡Alto, alto, no huyáis!. Debéis esperar a que negociemos.
(En ese momento llega William Wallace y los suyos a caballo. Llevan la cara pintada de azul, según la tradición. Otros hombres a pie llevan unos grandes bultos al hombro.)
-Soldado 1: Es William Wallace.
-Soldado 2: No puede ser. Es muy bajo.
(William Wallace y los suyos se acercan donde están los nobles escoceses.)
-Stephen: El Todopoderoso me dice que será una gran batalla. Ha congregado a los más distinguidos.
-Lochlan: ¿Y vuestro saludo?
-William: Por presentaros en el campo de batalla, os doy las gracias.
-Lochlan: Este es nuestro ejército. Para uniros, rendid pleitesía.
-William: Yo rindo pleitesía a Escocia. Y si este es vuestro ejército, ¿por qué está huyendo?
-Soldado 2: No hemos venido aquí para luchar por ellos.
-Soldado 1: ¡Vámonos! Los ingleses son demasiados.
-William: Hijos de Escocia, soy William Wallace
-Soldado 1: William Wallace mide más de dos metros.
-William: Si, eso dicen. Mata hombres a cientos. Y si estuviese aquí, acabaría con los ingleses echando fuego por los ojos… y también rayos por el culo. ¡Yo soy William Wallace! Y estoy viendo a un ejército de paisanos míos, aquí reunidos contra la tiranía. Habéis venido a luchar como hombres libres. ¡Y hombres libres sois!. ¿Qué haríais sin libertad? ¿Lucharéis? 
-Multitud: No, no.
-Soldado 2: ¿Contra eso? no. Huiremos y viviremos.
-William: Luchad y puede que muráis. Huid y viviréis. Un tiempo al menos. Y al morir en vuestro lecho, dentro de muchos años, ¿no estaréis dispuestos a cambiar todos los días desde hoy, por una oportunidad, solo una oportunidad de volver aquí a matar a nuestros enemigos? Pueden que nos quiten la vida, pero jamás nos quitarán ¡¡la libertad!!.
(Todos lo vitorean)